Migrantes en huelga de hambre piden a Biden extender el TPS como regalo navideño

Este lunes se cumplió una semana desde el inicio de la huelga de hambre emprendida por miembros de la organización National TPS Alliance en las cercanías de la Corte Suprema en Washington. Las gélidas temperaturas no han desalentado a la docena de migrantes en su esfuerzo por solicitar al presidente Joe Biden una medida de protección antes de la toma de posesión de Donald Trump el 20 de enero. Están pidiendo una extensión del Estatus de Protección Temporal (TPS) para residir legalmente en el país durante 18 meses más y para complicar los planes de deportación de la administración entrante. El presidente electo ha sido claro en sus intenciones de eliminar programas de alivio migratorio como la libertad condicional humanitaria, las citas de CBP One y el TPS.

The hunger strike is part of a week of action against deportations called by the Fair Immigration Reform Movement (FIRM) on the occasion of International Migrants Day, last Wednesday. “We are aware of the threats that are coming from the Trump administration [...] The hunger strike is to apply pressure and demand that Biden take action before Christmas,” said José Palma, coordinator of the Alliance. The protesters are confident that by repeating actions like these (which were also carried out during Trump’s first term) they will be able to remain in the country.

The protesters are staying in a Methodist church in the capital, and are provided with supplies of water and isotonic solution. They will undergo regular stress tests to check their health.